sábado, 17 de agosto de 2013

En recuerdo de Ángel, de parte de su mujer Maria Jesús

Tu historia, mi homenaje

Voy a tragarme mis lágrimas
por ti lo voy a lograr,
por mucho dolor que me cause
tu historia se debe contar;

Fuiste el pequeño de cuatro hermanos
desde siempre alguien especial,
tan delgadito como risueño
tan parecido a tu querida mamá;

Te conocí un día de marzo
en el parque en el que solías estar,
jugando con tus amigos
ahí ya me empezaste a gustar;

Íbamos en cuadrilla a la disco
en el fondo una excusa para quedar,
un 31 de Julio me pediste ser tu novia
y yo acepté sin dudar;

Cuatro años después, el 24 de Julio
ante un precioso altar,
nos juramos amor eterno
y no volvernos a separar;

Dos años más tarde
nuestro sueño se hizo realidad,
nació Maite, nuestra niña
tus ojos no dejaban de brillar;

Casi ocho años después nació Mikel
el colmo de nuestra felicidad,
nuestro círculo se cerraba
nuestra familia se acababa de completar;

Sentíamos un amor tan grande y puro
tan difícil de explicar,
esos años de felicidad plena
que en mi tristeza me obligo a recordar;

Me sorprendía mirando a distancia
quisiera retroceder y el tiempo poder parar,
volver a sonreír al verte con ellos
como disfrutaba viéndoos jugar; 

Fueron pasando los años
la vida nos golpeaba cada vez más
como siempre juntos de la mano
intentábamos superar;

Nunca olvidaré la tristeza de tu mirada
nada te podía consolar,
el día que perdiste a tu madre
fue la primera vez que te vi llorar;

Pero no pudiste reponerte
a tu hermano tenías que apoyar,
hacía meses que luchaba sin tregua
con esa maldita enfermedad;

Pero aun así sacaste fuerza de no se dónde
y luchaste por volver a juntar,
los trozos de mi triste alma
que la partida de mi padre hizo estallar;

Aun hoy se me encoge el alma cuando lo recuerdo
pero intento y quiero entender,
que no quería seguir sufriendo
y se rindió antes de perder;

Dos años después la vida nos golpeó de nuevo
tu hermano también se fue,
luchó con todas sus fuerzas
pero nada pudo hacer;

Tuviste problemas en el trabajo
y sin poderlo comprender,
te echaron a la calle
obligándote a empezar otra vez;

Encontraste otro trabajo
y cuando el mismo de siempre volvías a ser,
esta maldita vida volvió a pegarte
llevándose a tu padre también;

Empezaste a encontrarte cansado
sabíamos que algo no iba bien,
pero no pensamos que fuera tan grave
la puta enfermedad había vuelto a aparecer;

Siempre confiaste en superarlo
a todos nos hiciste creer,
que aunque grande era solo un bache
que como siempre íbamos a vencer;

Decías que nos merecíamos ser felices
que nuestra historia de amor no podía acabar así,
teníamos muchos sueños e ilusiones
muchos cosas que vivir;

Pero una vez más no te dejaron superarlo
y con el corazón roto me despedí de ti,
sin entender como nos pasaba esto
rota de dolor te vi partir;

Mi alma se fue contigo
¿Cómo iba a seguir?
mi vida estaba a tu lado
y contigo me quise morir;

Cómo superar que ya no estabas
que nuestros sueños no se iban a cumplir,
nos  merecíamos disfrutar ahora que podíamos
y desgraciadamente ya no estabas aquí;

Por el día creo superarlo
he conseguido hasta volver a reír,
pero cuando oscurece no puedo evitar el llanto
a solas no tengo que fingir;

Y me rompo pensando que ya no te tengo
me despierto a la noche creyendo sentir,
tu aliento en mi nuca y sonrío
pero me doy la vuelta y no estás ahí;

Intento que ellos no me vean triste
tengo que ser fuerte para ayudarles a digerir,
que su padre se fue dejando un vacío tan grande
que nada ni nadie podrá cubrir;

Tengo una gran familia que no me dejan sola
nuestros hijos la cuerda que no me permite hundir,
y tu recuerdo la más poderosa fuerza
que he descubierto dentro de mí;

Y llegará el día que tengamos nietos
a los que orgullosa podré decir,
que su abuelo es la persona más maravillosa
que en mi vida conocí;

Este legado que hoy dejo
el que mis lágrimas casi no me dejan escribir,
es el mejor y más bello homenaje
que puedo hacer para ti;

Para que lean la historia de su abuelo
y sepan que desde el principio al fin,
luchó contra viento y marea
para que su gente fuera feliz;

Gracias por amarme tanto
porque cada día me has hecho sentir,
tu compañera, tu vida entera
las más bella rosa de tu jardín.